Temía el buen hincha colchonero que si la temporada pasada fue Ballantines, el patrocinador del partido de hoy sería Gordon´s, pues la meteorología no acompañaba precísamente. Y hay que decir, que el juego, tampoco. Si bien Aguirre quiso darnos el gusto de ver a Agüero desde el inicio, también nos hizo la gracia de seguir confiando en Costinha y Luccin para los partidos en casa. Pero el Sevilla no es el Athletic, sino un conjunto rocoso, que además tiene calidad, y que como el Valencia aplica la filosofía de tan buenos resultados consistente en "si no me la das, te pego".
Y con otro colegiado, probablemente este partido lo habría ganado el Patadas FC, pero González Vázquez sacó pronto a pasear a las tarjetas, y eso, por una vez, favoreció al Atletico. El Sevilla juega duro, pero de ahí a tener licencia para pegar, hay un trecho, algo que afortunadamente hoy ha apreciado bien el colegiado. El intercambio de tarjetas ha sido contínuo y el partido se parecía cada vez más al de hace dos semanas contra el Valencia. Y en el marcador también: Típica pifia defensiva, ni Pablo ni Perea (¿qué le pasa a Perea?) Renato y gol. Otra vez en contra de marcador, contra el líder de la Liga y campeón de la Uefa.
Y comienza la segunda parte, y le toca la lotería a Escudé. A la calle. Rumor en la grada, esto se parece mucho al día del Valencia, verás como nos expulsan a alguien. Pero el equipo no carbura: Torres desconocido, Agüero muy cubierto, Petrov contra tres, la media que no la huele, Seitaridis empañando lo de Bilbao... y la defensa sufriendo. Y en esto sale Maniche, con 45 minutos de retraso. No fué un milagro, pero de repente se ofrecía, ocupaba hueco, tapaba, recuperaba, hacía diagonales y centraba: en definitiva, pensaba. Algo es algo. Y un Javi Navarro que se llevó la primera amarilla por protestar (ya tienen excusa para sentirse agraviados) la lía y se lleva la segunda. Juande quita a Kanouté y mete a Ocio, el mensaje es claro, va a haber acoso colchonero.
Suceden los minutos y no pasa nada, la gente empieza a desesperarse, no puede ser perder contra nueve, sigue sin haber circulación, todo un líder de la Liga, campeón de la Uefa y la Supercopa sometido a la presión rojiblanca, pero nada, no hay gol. Y surge la figura de Maxi Rodríguez, el crack en la sombra. Un primer aviso que Palop no acierta a blocar, y cuando esto se acababa, y eran otras la crítica del As, la risita de Roncero, y la chulería de Del Nido, aparece Maxi cual Rocco Siffredi y perfora la hasta ese momento virgen portería del Sevilla. Empate a uno y la locura, la olla a presión del Manzanares empieza a silbar, y Torres en aparición estelar la pone para que Maxi, La Fiera, vuelva a empujar el cuero, y pese a los evidentes problemas de juego del equipo, llegue en buenísima situación al Bernabéu.
- Rico.
Atlético-Sevilla: Licencia para pegar
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2 comentarios:
La épica es anecdótica y la constancia histórica, a ver si tenemos un poquito mas de esto ultimo...
Desastre defensivo, inconcluyente centro del campo, asombrosa delantera, partido en contra desde el principio.... y autentica victoria con intenso sabor rojiblanco.
24/09/06 que este feliz domingo se repita por los siglos de los siglos... amen
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