Atlético - Getafe: Pobres y hartos de pan.

Corren tiempos de incertidumbre. Una crisis económica en ciernes amenaza al país. Los responsables de la Real Federación Española de fútbol lo saben y para pagarse los viajes con toda la familia por Europa, han decidido ponerse la venda antes de tener la herida. Sólo así se explica, desde la óptica de la recesión económica, que hayan cogido a un mono, le hayan dado una tarjeta amarilla, una roja, un silbato y le hayan puesto a arbitrar este Atlético- Getafe.

Clos Gómez, que así se llama el homínido, y vive en un zoológico de Aragón, decidió darse a conocer al gran público en el partido de hoy, con actuaciones tan memorables como expulsar a Agüero por haber sido objeto de dos penaltis, y hacer uso de las tarjetas con una ligereza sólo comparable a la mía utilizando el diario As cuando se me acaba el papel higiénico en casa. Todo sea dicho, el Marca raspa más.

Cuidado, que venía al Calderón el segundo equipo de Madrid, como su propia afición se autodenomina. Equipo pobre pero honrado y que está conociendo su mejor época, apostando por un fútbol vistoso y ofensivo. Antes de volver al sitio que les corresponde por naturaleza, están viajando por Europa como Paco Martínez Soria en "El turismo es un gran invento". Lo malo de ser pobre y estar harto de pan es precisamente eso, que no dejas de ser pobre. Se nota en acciones como la de la primera parte en la que el espíritu de Diego Tristán volvió a aparecer, fallando Albín un gol claro a puerta vacía, como lo hiciera en su día el hoy jugador del Livorno (y que hoy ha marcado, que cosas tiene el fútbol).

Y si hay alguien que no falla es Diego Forlán, golito y tres puntos. Vale cada céntimo de lo que costó. Y no necesita estar ni bien. El Getafe se quedó con el balón y el Atlético empezó a sufrir. Claro que con esta defensa lo raro es no sufrir, no sólo por las ausencias sino porque hoy estaba Abbiatti. No es que con Franco no se sufra, que también, pero un tío tan alto como el italiano las ha pasado moradas hoy en los doscientos cincuenta o trescientos mil corners que ha concedido el homínido a los hoy amarillos, así como en las dos paradas de mérito de la segunda parte, en las que Abbiatti ha cumplido.

La segunda parte sólo ha tenido tensión, patadas e idas de pinza del Pato y de Reyes. Vale que Agüero hizo mal en tocarla con la mano, pero lo de Reyes es lamentable. Con el árbitro caliente, con el Getafe con uno menos y teniendo que recurrir a un condenado a prisión para defender la portería, sólo se le ocurre hacer esa falta. Al menos tenemos el consuelo de que no la cagará en Huelva.

Y al final sufrir como tontos porque el único que atacaba era el Getafe. El Atlético ha ganado por su definición, pero es incapaz de mantener el balón en determinados momentos críticos del partido. Y así hasta que el árbitro tras un descuento larguísimo se dio cuenta de que se había dejado los cacahuetes en la jaula.

- Rico.

4 comentarios:

FERNANDO SANCHEZ POSTIGO dijo...

Como muy bien, apuntas no sabemos controlar el balón y dormir el partido en los últimos minutos. Hoy tuvimos la fortuna de cara. Forlán sigue demostrando su olfato goleadoro, Simao va a más y Reyes no vale para nada. El árbitro se lió mucho.

un abrazo.

Hele Atlética dijo...

Yo no he visto las repeticiones todavía, pero por lo escuchado en la radio y lo visto en el campo me han parecido justas todas las tarjetas rojas.(dudo en la primera amarilla al Kun) Es más, creo que le ha perdonado la roja a Maniche.
En fín, hemos ganado y somos terceros. Eso cuenta.

Anónimo dijo...

Lo de Reyes ya es alarmante ¿a que ha venido? y no me refiero a la falta, me refiero al Atleti. Bendita cantera sevillista que entre Mari Jose y este me tienen frito...

atletista sin solución dijo...

La segunda tarjeta al Kun es injusta. Se vengó de él por engañarle en el primer penalti.

Por lo demás casi todo para olvidar menos el gol y los tres puntos.