Atlético – Sevilla: El material con el que está hecho el respeto.

Desde el descenso, el Atlético ha estado adorando a falsos ídolos, a gigantes con pies de barro (piensen en Torres haciendo un control), a multitud de falsos mesías de todo a cien que traía la directiva (pongan ustedes los nombres). El Atlético perdió además lo más importante: la identidad, el respeto, el saberse superior y tener la capacidad de demostrarlo, y la capacidad de no rendirse nunca. Tanto memento mori, tanto recordatorio de que este equipo es mortal, tantas ilusiones perdidas en tantas cunetas de tantas carreteras secundarias, y de repente, un fogonazo, una ilusión renovada, una vía a la esperanza, a la esperanza de recuperar el puesto que por derecho nos pertenece.

Eso es lo que se vio el Miércoles en el Calderón. Un equipo que golpea, que le golpean, que no se rinde, que no rehuye el intercambio, que sabe que tiene debilidades pero aún así no tiene miedo, que está dispuesto a morir en el verde. La tremenda pegada de este Atlético se vio desde el primer minuto, sin embargo, pronto tocó encajar tras el gol del Sevilla y la lesión de Forlán, que hizo mucho daño pues dejó sólo al Kun.

El Sevilla es el mejor equipo que ha pasado por el Calderón en lo que llevamos de Liga, rápido y con una gran pegada, un equipo que ha ganado cinco títulos en dos años, no es un Racing, no es un Zaragoza, es mucho más que eso, y sin embargo también se han llevado cuatro goles. El partido estaba controlado, pero el Atlético es mortal y el no entendimiento entre Ze Castro y Franco le regaló el empate al Sevilla, y de paso complica la diferencia de goles, que en cualquier caso habrá que pelearla en la vuelta.

Y apareció el capitán. A la Fiera se le da bien el Sevilla, y con un golazo dejó bien claro qué equipo estaba siendo mejor en el campo. El duelo empezaba a resolverse a patadas, y el gol fue fundamental pues este tipo de partido beneficia al Sevilla. Y para rematar la faena, nadie sobra, todos faltan, todos pueden aportar algo, y lo necesitamos más que nunca, porque contra el Villarreal hay bajas. Simao (Timao le llamaban algunos asientos por detrás de mí ) pone para Jurado y golazo. Pero esto es el Calderón, y aquí se viene a sufrir. El Sevilla se acercó tras otro despiste defensivo, ya en el descuento, que el incompetente Mejuto alargó cual tortura medieval.

En temporadas anteriores este partido se hubiera perdido, y se hubiera perdido por el golpe moral. Sin embargo este Atlético poco a poco encuentra su identidad, y en el Calderón es adrenalina, es vértigo, es presión al rival, es mandar desde el minuto uno. Para mí, uno de los mejores partidos de las últimas temporadas, la gente cantando el himno a la salida, el convencimiento de que por fin se juega con la actitud que hay que jugar, y sobre todo, que se está recuperando el respeto.

- Rico.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

queda mucho por hacer. Y no me vale quedar cuartos. Hay que luchar por la Liga.

un abrazo.

Fernando Torres es un crack y su nombre ya figura en la historia del At.Madrid con letras de oro. Por ejemplo, octavo máximo goleador y jugador que más partidos ha jugado con la selección española. A ver quien le supera de los actuales.

Baluarte Rojiblanco dijo...

Hola Fernando

Mi opinoón sobre Torres la puedes encontrar en este mismo blog:

http://baluarterojiblanco.blogspot.com/2007/01/como-slo-l-lo-hara.html

Y en cuanto a la marcha del equipo, hay que ir partido a partido pero yo creo que por una vez estaremos en la pomada hasta el final. un abrazo!

- Rico.